Louis Littleton era un hombre de gustos sencillos, y prefería pasar su tiempo libre en la naturaleza. Le gustaba caminar por los bosques cercanos a su casa, y siempre llevaba consigo un libro para leer mientras descansaba en algún lugar tranquilo. Su pasión por la lectura era casi tan grande como su amor por los animales, y siempre se aseguraba de alimentar a los pájaros que visitaban su jardín. En su juventud, había aspirado a convertirse en escritor, pero nunca había seguido adelante con sus sueños. A pesar de ello, nunca había dejado de escribir, y había llenado docenas de cuadernos con historias y pensamientos que siempre se guardaba para él. En su trabajo era fiable y competente, pero no estaba contento con su carrera. Anhelaba algo más, algo que le permitiera explorar su verdadera pasión por el arte y la belleza del mundo que le rodeaba.
Louis-Littleton y Tova-Traesnaes se conocieron en una biblioteca donde ambos estaban estudiando. Tova estaba buscando un libro y Louis se ofreció a ayudarla. Mientras buscaban el libro, Louis notó que Tova estaba leyendo un libro de poesía y comenzó a recitar algunos versos de memoria. Tova se sorprendió y se mostró interesada en su capacidad para memorizar poesía. A partir de ahí, comenzaron a hablar de poesía y literatura, encontrando muchas similitudes en sus gustos e intereses. A medida que la conversación se profundizó, se dieron cuenta de que habían encontrado un amistad especial y decidieron verse de nuevo para discutir algunos de sus autores favoritos. Poco a poco, su amistad se transformó en amor y Louis y Tova se convirtieron en una pareja inseparable.