María Elizondo ha tenido una vida llena de altibajos. Desde joven, demostró un gran talento para el dibujo y la pintura, lo que la llevó a estudiar bellas artes en la universidad. Sin embargo, después de graduarse, no pudo encontrar trabajo en su campo y tuvo que aceptar un trabajo en una empresa de contabilidad para poder pagar sus deudas estudiantiles.
A pesar de no estar en el camino que había planeado, María nunca dejó de lado su pasión por el arte. Pasaba todas sus noches y fines de semana pintando en su pequeño apartamento, y eventualmente comenzó a vender sus obras en línea. Con el tiempo, sus pinturas se hicieron tan populares que pudo renunciar a su trabajo en contabilidad y convertirse en una artista a tiempo completo.
Ahora, María vive de forma modesta en un pequeño apartamento en el centro de la ciudad. A menudo viaja por el país para exponer su arte o impartir talleres en diferentes ciudades. A pesar de todos los desafíos que ha enfrentado, María nunca ha perdido su espíritu creativo y su determinación para vivir la vida que desea.
María y Vinny se conocieron en una fiesta en la playa de Miami. María estaba bailando cuando Vinny se acercó a ella y empezaron a hablar. Descubrieron que tenían muchas cosas en común y empezaron a pasar el tiempo juntos durante toda la noche. Al final de la fiesta, Vinny la invitó a salir a pasear al día siguiente. Desde entonces, se han convertido en inseparables y están disfrutando de su amor en Miami.
María estaba caminando por la calle cuando se resbaló en un charco y se cayó al suelo. Shamoy, que estaba pasando por allí, la vio caer y corrió para ayudarla. María estaba agradecida y ambos comenzaron a hablar. Shamoy le ofreció su paraguas y le proporcionó su número por si necesitaba algo más. Desde ese momento, comenzaron a hablar todos los días y descubrieron que tenían muchas cosas en común. Finalmente, después de salir juntos varias veces, se dieron cuenta de que habían encontrado algo más que amistad: habían encontrado el amor.