Marie-Anne Walewska nació en 1786 en una familia noble polaca. A los 18 años, se casó con el Conde Anastasie Walewski y tuvieron un hijo juntos. En 1806, durante la invasión francesa de Polonia, Marie-Anne conoció al emperador Napoleón Bonaparte y se convirtió en su amante.
En 1810, Napoleón envió a Marie-Anne a Varsovia para que diera a luz a su segundo hijo, Alexandre. Después de dar a luz, Marie-Anne regresó a París y fue vista como una figura importante en la corte imperial.
En 1812, Napoleón le otorgó a Marie-Anne el título de Condesa Walewska y le permitió mantener a sus hijos en palacio. Sin embargo, su relación con el emperador no duró mucho tiempo y Marie-Anne se fue a vivir a Roma después de la caída de Napoleón.
En su vida posterior, Marie-Anne se dedicó a la caridad y fundó una escuela para huérfanos en Polonia. Murió en 1817 en París, a los 31 años, debido a una enfermedad. Su historia ha sido contada en varias obras de teatro, novelas y películas.
Marie-Anne Walewska fue una noble polaca que se convirtió en una de las amantes más famosas de Napoleón Bonaparte. Sin embargo, es común confundirla con su hija, también llamada Marie Walewska, quien se convirtió en la amante del sobrino de Napoleón Bonaparte, Louis-Napoléon Bonaparte, más conocido como Napoleón III.
Marie-Anne Walewska conoció a Napoleón Bonaparte en 1806 durante su estancia en Varsovia. Aunque estaba casada, se convirtió en una de las amantes más importantes de Napoleón y quedó embarazada de él en 1807. El hijo de ambos, Alexandre Walewski, nació en 1810 y fue reconocido por Napoleón como su hijo legítimo.
Por otro lado, Marie Walewska, la hija de Marie-Anne, conoció a Napoleón III en 1836 cuando ella tenía 18 años y él 28. En aquel entonces, Napoleón III era todavía un príncipe exiliado que intentaba recuperar el trono de Francia. Al igual que su madre, Marie se convirtió en una de las amantes más importantes de su amante, con quien tuvo un hijo ilegítimo llamado Alexandre Joseph Colonna-Walewski, en honor al medio hermano de su madre.
Aunque Marie-Anne y Marie Walewska fueron amantes de dos Napoleones diferentes y de épocas distintas, ambas mantuvieron relaciones duraderas y significativas con los hombres más poderosos de su tiempo.
El conde Alexandre Joseph Colonna Walewski y Marie-Anne Walewska tuvieron una relación romántica durante varios años en el siglo XIX. Walewski era la hija ilegítima del granjero polaco Józef Walewski, mientras que Colonna Walewski era un aristócrata francés de origen polaco que también era político y diplomático.
La relación entre Walewski y Colonna Walewski comenzó en 1831, cuando Marie-Anne viajó a París como parte de una delegación de nobles polacos que buscaban el apoyo de Francia para la independencia de Polonia. Colonna Walewski se enamoró de ella y comenzaron una relación que duró varios años.
En 1834, Marie-Anne dio a luz a un hijo, Alexandre Joseph Colonna Walewski, que se convertiría en un importante político francés y serviría como Ministro de Asuntos Exteriores bajo el gobierno de Napoleón III. La paternidad del niño nunca fue oficialmente reconocida por Colonna Walewski, aunque su relación con Marie-Anne continuó hasta que ella se casó con otro hombre en 1836.
A pesar de su final triste, la relación entre Count Alexandre Joseph Colonna Walewski y Marie-Anne Walewska ha sido recordada como uno de los romances más famosos y trágicos de la historia francesa.