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Marie-Thérèse Walter

Marie-Thérèse Walter

Marie-Thérèse Walter nació el 13 de julio de 1909 en Le Perreux, Francia. Desde joven, destacó por su belleza y su talento como modelo. En 1927, con apenas 18 años, conoció a Pablo Picasso en un café parisino, iniciando una relación amorosa que duró más de una década.

Durante este tiempo, Picasso realizó numerosos retratos de Marie-Thérèse, que se convirtió en su musa y su amante. Su relación se mantuvo en secreto durante un tiempo, ya que Picasso estaba casado con Olga Khokhlova.

En 1935, Marie-Thérèse dio a luz a la hija de Picasso, Maya. A pesar de esto, Picasso nunca dejó a su esposa y mantuvo una relación con ambas mujeres al mismo tiempo.

Tras el fin de su relación con Picasso, Marie-Thérèse se casó con el arquitecto Paul Lefèvre y tuvieron dos hijos juntos. Sin embargo, su depresión y problemas de salud mental la llevaron a intentar suicidarse en varias ocasiones. En 1977, se quitó la vida ahorcándose en su garaje en Juan-les-Pins, Francia.

Hoy en día, Marie-Thérèse es recordada como una de las grandes musas de Pablo Picasso y como un icono de la moda y la belleza de la década de 1930. Algunas de las obras más famosas de Picasso, como "La Rêve" y "Nude, Green Leaves and Bust", están inspiradas en ella.

Relaciones amorosas

Pablo Picasso

Pablo Picasso

Novia de Marie-Thérèse Walter

1927 - 1938

Marie-Therese Walter fue una modelo y amante de Pablo Picasso durante muchos años. Se conocieron cuando ella tenía 17 años y él 45. Fue durante la década de 1920, mientras el artista estaba casado con Olga Khokhlova.

Picasso se enamoró de Marie-Therese y la retrató en muchas de sus obras maestras. De hecho, se convertiría en una de las musas más importantes del artista.

Su relación fue tumultuosa, ya que Picasso mantuvo varias relaciones mientras estuvo con ella. También fue una época difícil para Marie-Therese, quien tuvo problemas de salud mental, lo que llevó a un intento de suicidio.

Finalmente, Picasso y Marie-Therese se separaron, principalmente debido a la insistencia de Olga en quedarse con él. Sin embargo, a lo largo de los años, Marie-Therese y Picasso mantuvieron una relación amistosa y él continuó viéndola hasta su muerte en 1973.

En resumen, la relación entre Marie-Therese Walter y Pablo Picasso fue una de las más significativas de la vida del artista. Ella se convirtió en una musa para él y aparece en muchas de sus obras más famosas. Aunque su relación fue tumultuosa, se mantuvieron en contacto hasta el final de la vida de Picasso.