Marthe Keller es una actriz y directora de cine suiza nacida en 1945 en Basilea. Comenzó su carrera en la década de 1960 como bailarina en el Ballet de Zurich antes de trasladarse a París para estudiar actuación en el Conservatorio Nacional de Arte Dramático.
Después de aparecer en varias producciones en París y Berlín, Keller llegó a Hollywood y protagonizó películas como "Marathon Man" y "Black Sunday". A lo largo de su carrera, ha trabajado con destacados directores como François Truffaut, Billy Wilder y Sidney Lumet.
En la década de 1990, Keller comenzó a dirigir películas y teatro. Su obra de director incluye producciones de "La traviata" y "Madama Butterfly" en la Ópera Nacional de París, así como la película "L'ange de goudron".
Keller ha recibido varios premios y honores por su trabajo, incluyendo la Legión de Honor de Francia y el Premio del Festival de Cine de Berlín. Actualmente, sigue trabajando como actriz y directora, y vive en París.
Marthe Keller y Al Pacino se conocieron en el set de la película "Bobby Deerfield" en 1977. La química entre ambos fue evidente en la película, lo que llevó a una relación romántica fuera del set.
Sin embargo, la relación de Keller y Pacino no duró mucho tiempo y se separaron al poco tiempo después de la película. A pesar de la ruptura, ambos actores mantuvieron una buena relación profesional.
Pacino y Keller volvieron a trabajar juntos en la película de 1990 "Dick Tracy", donde interpretaron a dos villanos. Desde entonces, han mantenido una amistad cercana y han hablado el uno del otro en términos muy favorables en varias entrevistas.
Marthe Keller y Philippe de Broca tuvieron una relación sentimental durante varios años. Keller es una actriz suiza conocida por su carrera internacional en películas como "Marathon Man" y "Black Sunday", mientras que De Broca fue un director de cine francés conocido por películas como "King of Hearts" y "That Man from Rio".
La relación de Keller y De Broca comenzó en los años 70, cuando trabajaron juntos en la película "Le jour de gloire". Continuaron colaborando en varias películas más, incluyendo "L'homme qui aimait les femmes" y "Les caprices de Marie".
Aunque la relación terminó en la década de 1980, Keller y De Broca siempre mantuvieron una amistad cercana. Después de la muerte de De Broca en 2004, Keller habló apasionadamente sobre su colaboración en el cine y su profundo amor y respeto por él como persona y como artista.
En resumen, Marthe Keller y Philippe de Broca tuvieron una relación amorosa que comenzó en los años 70 y se prolongó durante varios años, aunque eventualmente se separaron. A pesar de esto, mantuvieron una amistad cercana hasta la muerte de De Broca en 2004.