Mary Kelsey

Mary Kelsey fue una misionera canadiense nacida en 1872. A finales del siglo XIX, se embarcó en una misión con la Iglesia Presbiteriana de Canadá en la costa oeste de Columbia Británica. Kelsey fue la primera mujer misionera en establecerse en ese territorio y fue vista por muchos como una figura heroica debido a los peligros que tuvo que enfrentar. Durante su tiempo allí, Kelsey trabajó junto a otros misioneros para establecer una escuela y brindar atención médica a los nativos. También se esforzó por promover la igualdad de derechos de las mujeres y los indígenas. Fue muy respetada por la comunidad de la zona por su compromiso y dedicación en ayudar a los más necesitados. A lo largo de su carrera, Kelsey enfrentó muchos desafíos, incluyendo el tener que vivir en condiciones difíciles y aislamiento, y la confrontación con las diferencias culturales. Sin embargo, logró superar todas estas dificultades y se mantuvo comprometida con su trabajo hasta el fin de sus días. Kelsey falleció en 1961 a la edad de 88 años, pero su legado como defensora de los derechos humanos y trabajadora incansable en beneficio de las personas más vulnerables y necesitadas, sigue siendo una inspiración hoy en día.