Michael Curtiz fue un director de cine y productor nacido en Hungría en 1886. Comenzó su carrera en el cine en Europa, pero en 1926 se trasladó a Estados Unidos para trabajar en Hollywood. Allí se convirtió en uno de los directores más importantes de la época dorada de Hollywood, dirigiendo películas como "Casablanca" (1942), "The Adventures of Robin Hood" (1938) y "Mildred Pierce" (1945). Curtiz fue un director prolífico que hizo más de 170 películas a lo largo de su carrera, abarcando diversos géneros y estilos. Fue conocido por su habilidad para manejar grandes elencos y hacer películas complejas y llenas de acción. Curtiz ganó el premio de la Academia al Mejor Director por "Casablanca" en 1943, pero su influencia en el cine va más allá de ese logro. Su trabajo ha influido en generaciones de directores y su legado sigue siendo evidente en la industria del cine hoy en día. Curtiz falleció en 1962 en California, dejando tras de sí una rica y variada carrera en el cine, que sigue siendo una inspiración para muchos cineastas.