Nina Stevens

Nina Stevens llevaba años buscando un cambio en su vida. Había logrado cierto éxito como abogada, pero su trabajo la dejaba insatisfecha y en constante estrés. Por fin, decidió tomar un año sabático y recorrer el mundo. Fue una experiencia inolvidable, conoció gente de distintas culturas, probó nuevos sabores y descubrió un amor por la fotografía. Al volver a casa, decidió dejar la abogacía y enfocarse en su nueva pasión. Comenzó a trabajar como fotógrafa independiente y poco a poco fue ganando reconocimiento. Sus fotos eran publicadas en revistas de renombre y expuestas en galerías de arte. Al mismo tiempo, inició un proyecto personal en el que retrataba a personas desconocidas en situaciones cotidianas, buscando mostrar la belleza en lo ordinario. Su trabajo la llevó a lugares recónditos y a vivir situaciones inesperadas, pero lo mejor era que cada día se sentía realizada y feliz con lo que hacía.