Olivier Chandon De Brailles nació el 30 de julio de 1955 en Neuilly-sur-Seine, Francia, siendo hijo del empresario Henri Chandon y de la modelo Odile de la Rochefoucauld. Estudió en el prestigioso Lycée Henri IV de París y luego se graduó en la Universidad de Harvard en Estados Unidos.
En 1983, Olivier comenzó a trabajar en la compañía de su familia, Moët et Chandon, una empresa de champán de renombre mundial. Durante su tiempo allí, se convirtió en presidente de la junta de DFS (Distributed File System) Group, una empresa de venta minorista de lujo. Olivier introdujo varias iniciativas exitosas que contribuyeron al crecimiento y desarrollo de DFS.
Además de su trabajo, Olivier también se dedicó a ser deportista, especialmente en el deporte ecuestre, fue un reconocido jinete de carreras y compitió en varias competencias.
Trágicamente, Olivier falleció en un accidente automovilístico el 2 de julio de 1983, a la edad de 27 años. La muerte de Olivier fue una gran pérdida para su familia, amigos y la comunidad empresarial en general. A su memoria, su familia creó la Fundación Olivier Chandon De Brailles para apoyar proyectos de investigación y desarrollo de nuevos tratamientos para la ceguera.
Christie Brinkley y Olivier Chandon de Brailles tuvieron una breve relación en la década de 1980. Olivier Chandon de Brailles era un empresario francés heredero de la fortuna de la familia Chandon de Moët & Chandon, conocida por su producción de champagne. Christie Brinkley, por su parte, era una supermodelo estadounidense que se convirtió en un icono de la moda en los años 80.
La relación entre ambos se intensificó cuando Olivier Chandon de Brailles se mudó a Nueva York para estudiar en la Universidad de Columbia. Fue en esa ciudad donde Christie Brinkley y Olivier se conocieron y comenzaron a salir. A pesar de la diferencia de edad, ya que él tenía 26 años y ella 30, la pareja se llevaba bien y disfrutaban del tiempo juntos.
Sin embargo, la relación terminó trágicamente cuando Olivier Chandon de Brailles murió en un accidente de avión en 1983 en Francia. En ese momento, Christie Brinkley estaba devastada y expresó su dolor públicamente por la pérdida de su novio. Desde entonces, la modelo ha seguido adelante con su vida y ha tenido varias relaciones amorosas a lo largo de los años.