Olympia Mancini, también conocida como Comtesse de Soissons, fue una noble italiana del siglo XVII, nacida en Roma en 1639. Era la hija más joven de Lorenzo Mancini y de su esposa Geronima Mazarino, hermana del cardenal Jules Mazarin.
Olympia y sus cinco hermanas fueron enviadas a París en 1647 para asegurar su futuro mediante los matrimonios concertados. A la edad de 15 años, Olympia se casó con el noble francés Eugene-Maurice de Soissons, con quien tuvo dos hijos antes de enviudar a la edad de 19 años.
Después de la muerte de su esposo, Olympia consiguió grandes amantes, incluyendo al príncipe de Condé y al rey Carlos II de Inglaterra. También se rumoreaba que había tenido una aventura con Molière.
En 1680, Olympia fue acusada de envenenamiento y conspiración contra el rey Luis XIV. Huyó a Bruselas, pero fue capturada y obligada a exiliarse a Lorena. Finalmente se trasladó a Suiza, donde vivió con su hijo Louis Joseph. En 1708, regresó a Roma, donde murió en 1708 a la edad de 69 años.
Eugene-Maurice de Soissons era un noble francés del siglo XVII, miembro de la Casa de Bourbon-Soissons. Olympia Mancini, por otro lado, era una aristócrata italiana, sobrina del cardenal Mazarino y una de las famosas Mazarinettes.
Eugene-Maurice y Olympia se conocieron en la corte francesa y se enamoraron apasionadamente. Sin embargo, su relación fue desaprobada por la familia de Eugene-Maurice y terminó cuando Olympia fue obligada a casarse con otro hombre.
A pesar de la separación, la relación entre Eugene-Maurice y Olympia sigue siendo objeto de interés histórico y literario. La historia de su amor ha sido recreada en varias obras de ficción y ha sido objeto de estudio de los historiadores que se centran en la Francia del siglo XVII.
La relación entre Olympia Mancini y Luis XIV de Francia fue una de las más famosas y polémicas del siglo XVII. Olympia era sobrina de la esposa del rey, Ana de Austria, y llegó a la corte francesa en 1654 para casarse con el príncipe Eugenio Mauricio de Saboya.
Sin embargo, Olympia pronto se convirtió en una de las favoritas del rey y su relación se hizo cada vez más cercana. A pesar de que el rey estaba casado con María Teresa de Austria, continuó viendo a Olympia y tuvo numerosos hijos con ella.
La relación de Olympia y Luis XIV fue muy pública, lo que hizo que la corte y la sociedad francesa se escandalizaran. Además, la influencia de Olympia en el rey llevó a que muchos políticos y aristócratas se sintieran amenazados por ella y por su posible influencia en la política del reino.
Después de varios años de una relación tumultuosa, el rey se alejó de Olympia en 1668 y ella se retiró de la corte. Sin embargo, su relación con Luis XIV había dejado una huella imborrable en la historia de Francia y fue recordada como una de las más escandalosas y emocionantes del siglo XVII.