Peter Sussman siempre ha sido un apasionado de la música y el arte, desde pequeño se dedicaba a tocar la guitarra y el piano, aunque decidió estudiar ingeniería en la universidad. Después de graduarse, trabajó por varios años en una empresa de tecnología, pero su pasión por la música nunca disminuyó.
Finalmente, decidió dejar su trabajo y dedicarse por completo a la música, convirtiéndose en un reconocido guitarrista de jazz en su ciudad natal. Pero no solo se limitó a tocar en bares y clubes nocturnos, también dio clases de guitarra a jóvenes talentos y participó en proyectos de voluntariado musical para niños.
Además de la música, Peter también es un gran amante del deporte y de la naturaleza, le encanta correr y practicar senderismo en los parques cercanos. A menudo da charlas sobre la importancia del ejercicio y el cuidado del medio ambiente.
En resumen, Peter Sussman es un hombre que ha decidido seguir su pasión y vivir la vida de manera armónica, combinando su talento musical, su amor por la naturaleza y su compromiso social.
Bethenny Frankel y Peter Sussman tienen una larga historia juntos. Sussman fue el propietario de la compañía de producción que lanzó el programa de televisión "The Real Housewives of New York City" en el que Frankel apareció como una de las miembros originales del reparto. El programa tuvo un gran éxito y ayudó a catapultar la carrera de Frankel.
Sin embargo, la relación entre Frankel y Sussman se ha vuelto complicada en los últimos años. En un momento dado, Frankel acusó públicamente a Sussman de haber tomado el crédito por su éxito en el programa de televisión sin compensarla adecuadamente. Frankel también presentó una demanda en la que afirmaba que Sussman había tomado indebidamente dinero de la compañía en la que ella había invertido.
A pesar de estos problemas, Frankel y Sussman han trabajado juntos en otros proyectos. Frankel lanzó su propia marca de margaritas en 2011, y Sussman se unió al equipo de la compañía como asesor financiero. La marca de margaritas de Frankel se convirtió en un gran éxito y fue vendida por millones de dólares.
A pesar de las dificultades en su relación en el pasado, parece que Frankel y Sussman han sido capaces de mantener una relación de trabajo productiva.