Primo Carnera fue un boxeador italiano nacido en 1906 en Sequals, Friuli, Italia. Fue uno de los boxeadores más grandes y pesados de la historia, con una altura de 6 pies 6 pulgadas y un peso de 260 libras.
Comenzó su carrera de boxeo en Europa a los 19 años y después de una serie de victorias, se trasladó a los Estados Unidos en 1933 para luchar contra otros boxeadores de renombre.
En 1934, Carnera ganó el título mundial de peso pesado al derrotar a Jack Sharkey en una pelea polémica. Perdió el título en 1935 ante Max Baer y nunca lo recuperó.
Durante su carrera, Carnera fue objeto de muchas críticas y acusaciones de farsante, drogadicto y de haber sido utilizado como un títere por su manejador. También se ha sugerido que sus peleas fueron arregladas y que a menudo luchaba contra oponentes que eran mucho más pequeños que él.
Después de retirarse del boxeo en 1946, Carnera regresó a Italia donde trabajó como actor y luchador profesional.
Murió en 1967 a los 60 años debido a complicaciones relacionadas con la cirrosis hepática, atribuida a su consumo excesivo de alcohol durante toda su vida.
Giuseppina Kovacic y Primo Carnera fueron una pareja italiana de la década de 1930. Kovacic era una pintora y modelo de moda, mientras que Carnera era un famoso boxeador profesional, conocido como el "Gigante del Ring".
La historia de amor entre Kovacic y Carnera comenzó en 1933, cuando se conocieron en un evento público en Italia. A partir de ese momento, se convirtieron en inseparables y fueron fotografiados juntos en numerosas ocasiones. Kovacic a menudo acompañaba a Carnera a sus peleas y se convirtió en una presencia constante en su vida.
Sin embargo, la relación no estuvo exenta de polémica. En 1937, Carnera se casó con su primera esposa, y aunque nunca se divorció legalmente de ella, comenzó una relación con Kovacic. Esto causó un gran escándalo en la sociedad italiana de la época, aunque la pareja no se separó.
La relación entre Kovacic y Carnera terminó trágicamente en 1945, cuando Kovacic murió en un accidente automovilístico en Italia. Su muerte dejó a Carnera destrozado y, según informes, nunca se recuperó completamente de la pérdida.
En resumen, la relación entre Giuseppina Kovacic y Primo Carnera fue una historia de amor polémica que se convirtió en una parte integral de la cultura popular italiana de la década de 1930. A pesar de la controversia, la pareja permaneció junta hasta la muerte de Kovacic.