Princess Milica of Montenegro (1866-1951) was a member of the royal family of Montenegro. She was the daughter of Prince Nikola I Petrović-Njegoš and his wife, Milena Vukotić. Milica was educated in Paris and was known for her beauty and intelligence.
In 1889, Milica married Grand Duke Peter Nicolaievich of Russia, a grandson of Tsar Nicholas I. The couple had two children, Prince Roman and Princess Elena. Milica was a beloved member of the Russian imperial court and was known for her philanthropic and cultural pursuits.
After the Russian Revolution of 1917, Milica and her family were forced to flee Russia and eventually settled in exile in France. Milica continued to be active in cultural and philanthropic causes and was well-respected in European society.
Milica died in Cannes, France in 1951 at the age of 84. She was buried in the Russian Orthodox cemetery in Sainte-Geneviève-des-Bois, France.
El Gran Duque Peter Nikolaevich de Rusia y la Princesa Milica de Montenegro fueron amigos cercanos y se dice que tuvieron un romance apasionado en su juventud.
Peter Nikolaevich era el hijo menor del Gran Duque Nicolás Nicolaevich de Rusia y la Princesa Anastasia de Montenegro, mientras que Milica era la hija menor del rey Nicolás I de Montenegro y la Reina Milena.
El Gran Duque Peter y la Princesa Milica se conocieron durante una visita del Gran Duque Nicolás a Montenegro en 1897. Se enamoraron rápidamente y comenzaron una correspondencia secreta que duró varios años.
Sin embargo, su amor no estaba destinado a ser. Las diferencias culturales y religiosas, así como la oposición de las familias reales, hicieron imposible que se casaran. Además, el Gran Duque Peter se enamoró más tarde de la Gran Duquesa Militza de Montenegro (hermana mayor de la Princesa Milica) y se casó con ella en 1912.
A pesar de no poder estar juntos, Peter y Milica mantuvieron su amistad durante toda su vida. Milica se casó con el Gran Duque Peter de Rusia en 1921 después de que su hermana, la Gran Duquesa Militza, falleciera. Después de la Revolución rusa, la pareja se exilió a Francia, donde pasaron el resto de sus días.
En resumen, la relación entre el Gran Duque Peter Nikolaevich de Rusia y la Princesa Milica de Montenegro fue complicada debido a las diferencias culturales y religiosas, pero mantuvieron una amistad cercana y duradera.