Eddie Griffin y Aiko Tanaka se conocieron en un bar de Los Ángeles durante una noche de stand-up comedy. Eddie estaba actuando en el escenario y Aiko estaba en la audiencia. Cuando Eddie se acercó a ella para hacer una broma, ella respondió con una respuesta ingeniosa que lo hizo reír y se conectaron al instante. Después del show, intercambiaron números de teléfono y comenzaron a salir juntos. La química entre ellos era imposible de ignorar y se volvieron inseparables. Desde entonces, han sido compañeros y han compartido muchas risas y momentos inolvidables juntos.
