Aleksandra y Robert se conocieron en un bar de Varsovia. Ella estaba disfrutando de una noche con sus amigas cuando él se acercó a pedirle una bebida. Al principio ella pensó que era un chico presumido, pero después de hablar un rato, se dio cuenta de que tenían muchas cosas en común. La química entre ellos fue instantánea y pasaron toda la noche hablando y riendo juntos. Desde ese momento, se hicieron inseparables y comenzaron a salir juntos. Su relación floreció y hoy en día, son una pareja feliz y exitosa.
