Alfred Gwynne Vanderbilt II y K.T. Stevens se conocieron durante la Segunda Guerra Mundial cuando Stevens era una actriz de Hollywood que trabajaba en espectáculos de entretenimiento para las tropas. La pareja se enamoró y se casó poco después de conocerse. Vanderbilt II era un magnate de los negocios y dueño de varias líneas navieras y ferroviarias. También era un ávido deportista y criador de caballos de carreras. Stevens, por su parte, era una actriz que apareció en varias películas de Hollywood en los años 40 y 50. Juntos, la pareja tuvo dos hijos y construyó una residencia en Long Island llamada "Idle Hour", que era conocida por sus impresionantes jardines. Vanderbilt II y Stevens también eran conocidos por su generosidad y se involucraron en varias causas benéficas a lo largo de sus vidas. Desafortunadamente, su matrimonio no duró mucho tiempo debido a la intensa agenda comercial de Vanderbilt II, lo que lo llevó a pasar largos períodos de tiempo en el extranjero. La pareja se separó en la década de 1950 y finalmente se divorció en 1958. A pesar de esto, Vanderbilt II y Stevens mantuvieron una relación amistosa y criaron a sus hijos juntos.