Andrea y Sebastián se conocieron en una fiesta cuando eran estudiantes universitarios. Al principio, no se hablaron mucho, pero después de un rato, se encontraron hablando en una esquina. Se dieron cuenta de que compartían intereses en común y se divirtieron hablando de sus pasatiempos favoritos. Andrea se sorprendió al descubrir que Sebastián también disfrutaba de la música de los años 80, al igual que ella. En cambio, Sebastián estaba impresionado por la habilidad de Andrea para hacer postres deliciosos. Después de esa noche, comenzaron a hablar con más frecuencia y finalmente se convirtieron en amigos cercanos. Los dos pasaban tiempo juntos, ya sea tomando café, jugando videojuegos o haciendo fiestas en la casa de uno de ellos. A medida que su amistad crecía, Andrea y Sebastián se dieron cuenta de que sentían algo más que una simple amistad. Con el tiempo, ambos descubrieron que se gustaban y comenzaron una relación romántica que continuó después de la universidad. Hoy en día, Andrea y Sebastián son una pareja feliz y fuerte. Se sienten agradecidos por haberse conocido en esa fiesta y por haber tenido la oportunidad de enamorarse el uno al otro.