Anita-Blond y Rick-Masters se conocieron de manera peculiar en una sesión de fotos para una revista de adultos en la que ambos participaron como modelos. Al principio, se miraban con desconfianza, pero a medida que avanzaba la sesión, la química entre ellos era cada vez más evidente. Después de la sesión, Rick se acercó a Anita y le preguntó si quería tomar un trago juntos para celebrar su trabajo. Anita, con una sonrisa coqueta, aceptó la invitación y juntos fueron a un bar cercano. Durante la conversación, se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común y se sintieron atraídos el uno al otro. Después de varias horas hablando, decidieron continuar la noche en el apartamento de Rick. Fue una noche llena de pasión y fuego que ambos recordarían durante mucho tiempo. Se convirtieron en amantes apasionados y siempre recordarían la forma en que se conocieron como algo especial.