Anita estaba caminando por las calles de Budapest cuando vio a Viktor sentado en un banco. Él estaba cantando una canción y ella se detuvo para escucharlo. Después de que terminó la canción, Anita se acercó a él y le dijo que tenía una voz increíble. Viktor sonrió y le agradeció el cumplido. Comenzaron a hablar y se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común, incluyendo su amor por la música. Viktor le preguntó a Anita si ella también cantaba, y ella le respondió que sí. Él le pidió que cantara algo y ella aceptó, cantando una canción que había compuesto ella misma. Viktor quedó impresionado con su talento y le preguntó si le gustaría formar una banda juntos. Anita aceptó emocionada y así comenzó su increíble aventura en la música juntos. Con el tiempo, su amistad se convirtió en una relación más profunda y se enamoraron el uno del otro. Ahora, como pareja y compañeros de banda, han logrado alcanzar sus sueños y son reconocidos en todo el mundo como talentosos artistas.
