Danny-Wisker y Anna-Kelle se conocieron en una fiesta de cumpleaños. Danny estaba charlando con algunos amigos cuando Anna se acercó al grupo a saludar a uno de ellos. Danny no pudo apartar los ojos de ella desde el momento en que la vio. Después de intercambiar algunas palabras, decidieron que querían pasar más tiempo juntos y decidieron ir a tomar unas copas en un bar cercano. A medida que la noche avanzaba, se dieron cuenta de que tenían mucho en común y la conexión entre ellos era tangible. Terminaron la noche con un paseo juntos por las calles de la ciudad, hablando sobre sus intereses y objetivos de vida. Danny recordaría este día como el comienzo de una relación amorosa que cambió su vida para siempre.
