Anne-Shirley y Charles-Lederer se conocieron en una fiesta en la casa de un amigo en común. Charles estaba en medio de una conversación aburrida y sin sentido con un grupo de personas, cuando escuchó una risa melodiosa y contagiosa proveniente del otro lado de la sala. Él se volteó para ver a la persona detrás de esa risa y sus ojos se encontraron con los de Anne-Shirley. Desde ese momento, Charles sintió que algo en su interior cambió. Él se acercó a Anne, quien estaba rodeada de amigos, pero encontró la manera de hacerse notar. Anne, por su parte, quedó fascinada por la inteligencia y la conversación interesante de Charles. Pasaron horas hablando sin parar y parecía que el resto del mundo se había desvanecido. Fue como si se conocieran desde mucho tiempo atrás. Al final de la noche, Charles no pudo evitar preguntarle a Anne si estaría interesada en salir con él. Sorprendentemente, Anne dijo que sí. Desde ese momento, comenzó una historia de amor inolvidable entre dos personas destinadas a estar juntas. Charles siempre recordará esa fiesta como el momento en que encontró a su alma gemela, y Anne nunca se cansará de recordar cómo se enamoró de sus ojos verdes y su conversación inteligente.
