Frederick, Príncipe de Gales, tuvo una relación con Anne Vane, que fue su amante. Anne era una dama de compañía de la princesa de Gales y empezó a tener una relación con Frederick en 1735. La pareja tuvo varios hijos juntos, pero Frederick nunca se casó con Anne. Su relación con Anne fue descubierta por su padre, el rey Jorge II, quien se opuso a la relación y ordenó a Frederick que rompiera con ella. Sin embargo, esto no sucedió y la relación continuó hasta la muerte de Frederick en 1751. Su relación con Anne generó controversia y fue visto como una muestra de su conducta irresponsable y falta de juicio. También se cree que su relación con Anne fue una forma de rebelión contra su padre, el rey. En resumen, Frederick, Príncipe de Gales, tuvo una relación con Anne Vane, su amante y dama de compañía, que duró varios años y produjo varios hijos. Esta relación fue vista como una muestra de su conducta irresponsable y de su rebelión contra su padre, el rey Jorge II.
