Armando y Laura se conocieron en un set de grabación. Él estaba interpretando a un detective y ella a la víctima de un crimen. Durante una de las escenas, Armando notó que Laura se estaba sintiendo incómoda con el guión y decidió hablar con ella en su tiempo libre para ofrecerle su apoyo y ayuda. Después de esa conversación, comenzaron a hablar más y más durante los descansos de grabación y descubrieron que compartían muchas cosas en común. Poco a poco, su amistad se convirtió en algo más íntimo, y ahora, diez años después, siguen siendo inseparables.
