Era un día soleado en la playa de Los Ángeles y Ashley se encontraba disfrutando del mar mientras escuchaba su música favorita. De repente, una pelota de fútbol se acercó a ella y se detuvo a sus pies. Ashley levantó la cabeza y vio a Hunter corriendo rápidamente hacia ella para recuperar la pelota. Ashley, sorprendida por la velocidad y agilidad de Hunter, se presentó y ambos comenzaron a hablar. Se descubrió que compartían intereses similares, como el amor por la música y los deportes al aire libre. Durante el resto del día, Ashley y Hunter pasaron tiempo juntos explorando la playa y compartiendo historias sobre sus vidas. Descubrieron que ambos eran nativos de Texas y que se habían mudado a Los Ángeles en busca de nuevas oportunidades. A medida que el día llegaba a su fin, Ashley y Hunter intercambiaron números de teléfono y prometieron mantenerse en contacto. Desde entonces, han sido buenos amigos y han explorado juntos la hermosa ciudad de Los Ángeles. No saben lo que depara el futuro, pero están emocionados de descubrirlo juntos.
