Un día caluroso de verano en California, Austin Moore estaba caminando por la playa cuando vio a Erica Boyer tomando el sol. Quedó impresionado por su belleza natural y decidió acercarse a ella. Se presentó y comenzaron a conversar. Descubrieron que compartían muchas cosas en común, incluyendo su amor por la música y la naturaleza. Austin le preguntó si le gustaría ir a un concierto con él esa noche y Erica aceptó encantada. Durante el concierto, Austin y Erica se sintieron atraídos el uno por el otro. Bailaron juntos toda la noche y se divirtieron mucho. Después del concierto, caminaron por la playa bajo las estrellas y se quedaron hablando hasta el amanecer. Esa noche, comenzó una historia de amor que duraría para siempre.
