Bianca-Gascoigne y Leo-Iheanacho se conocieron inesperadamente en un partido de fútbol en Londres. Leo estaba jugando con su equipo y Bianca estaba en las gradas viendo el partido con algunos amigos. Durante el partido, una pelota golpeó a Bianca en la cabeza por error, y Leo inmediatamente corrió hacia ella para asegurarse de que estaba bien. Después de disculparse y reír sobre el incidente, comenzaron a hablar y descubrieron que tenían mucho en común. Después del partido, Leo invitó a Bianca a tomar un café y ella aceptó. Durante la conversación, se dieron cuenta de que el fútbol era solo una pequeña parte de sus intereses mutuos. Pasaron un rato muy agradable juntos y rápidamente se hicieron amigos. Desde entonces, han estado saliendo juntos y disfrutando de su amor por la música, la moda y los viajes. Nunca imaginaron que una pelota de fútbol podría llevar a un encuentro tan especial.
