La relación entre Boris Johnson y Petronella Wyatt fue una relación sentimental que se desarrolló en la década del 2000. Wyatt es periodista y escribió para varios periódicos británicos, incluyendo The Sun y The Sunday Telegraph. Ella conoció a Johnson mientras trabajaba como columnista política en The Spectator, una revista de la que Johnson era editor en ese momento. Comenzaron a salir juntos, a pesar de que Johnson estaba casado en ese momento con su segunda esposa, Marina Wheeler. Wyatt quedó embarazada y afirmó que Johnson era el padre de su hijo, pero abortó el embarazo. Más tarde, Wyatt habló públicamente sobre su relación con Johnson y el aborto, lo que causó una gran controversia en los medios de comunicación británicos. Johnson negó tener una relación con Wyatt y llamó a las afirmaciones de paternidad "una completa y absoluta mentira". Posteriormente, admite su relación y estuvo a punto de renunciar a su cargo como diputado y las elecciones al Alcalde de Londres, en el 2008, tras admitir que había mentido al primer ministro y al público sobre su relación con ella. Aunque inicialmente se creía que la relación entre Johnson y Wyatt había terminado después del aborto, los informes sugieren que mantuvieron su romance en secreto durante varios años. Wyatt ha escrito sobre su relación con Johnson en sus columnas y en un libro que publicó en 2008, titulado “In Full View: A true and shocking story of vanity, greed and lust in the City of London”. En resumen, la relación entre Boris Johnson y Petronella Wyatt fue una relación sentimental que causó controversia en los medios de comunicación británicos. Wyatt afirmó que Johnson era el padre de su hijo y habló públicamente sobre la relación, lo que causó un gran revuelo. Johnson negó inicialmente la relación, pero finalmente la admitió.
