Brad Pitt y Jill Schoelen mantuvieron una relación sentimental en la década de 1980, mientras trabajaban juntos en la película "Cutting Class". La pareja se comprometió pero después de algunos meses decidieron terminar su relación. Según se informó en su momento, la ruptura se debió a diferencias de opinión sobre su carrera y, específicamente, sobre la decisión de Schoelen de mudarse a Budapest para filmar una película en la que Pitt no estaba interesado. Pese a que su relación fue breve, Schoelen fue una de las primeras novias públicas del actor y su compromiso fue anunciado en varias revistas de la época. Desde entonces, Pitt se ha mantenido en el ojo público, tanto por su exitosa carrera como actor, como por sus relaciones sentimentales.
