Britney Stevens y Jeremy Steele se conocieron en un evento de la industria del cine para adultos en Las Vegas. Ambos habían sido invitados como actores principales en una película y se encontraron en una sesión de fotos promocionales. En un principio, no hablaron demasiado, pero cuando se dieron cuenta de que compartían muchos intereses y pasatiempos, comenzaron a hablar de manera más amistosa. Después de intercambiar números de teléfono, continuaron hablando y eventualmente se convirtieron en buenos amigos, pasando mucho tiempo juntos tanto dentro como fuera del set. A medida que su amistad se fortalecía, comenzaron a considerar la posibilidad de trabajar en más proyectos juntos y, finalmente, comenzaron a salir juntos como pareja en una relación estable.