Bruce Lee y Sharon Farrell se conocieron en Los Ángeles a principios de la década de 1960, cuando ambos estaban involucrados en la industria del cine. Farrell era una actriz de origen irlandés que había aparecido en varias películas, mientras que Lee estaba tratando de hacerse un nombre en Hollywood. Según los informes, la pareja comenzó a salir poco después de conocerse y rápidamente se enamoraron. Farrell, a menudo se refería a Lee como su "verdadero amor" y lo apoyó en su carrera de artes marciales. La relación fue breve, duró solo un año, pero fue significativa para la vida personal de Bruce Lee. Farrell fue una gran influencia en su estilo de vida saludable, lo alentó a dejar de fumar y a comer mejor, y esto resultó en el desarrollo del programa de entrenamiento que él eventualmente llamó “Jeet Kune Do”. La pareja terminó debido a las presiones de la familia de Bruce Lee, quienes se oponían a su relación con una actriz blanca, y debido a las creencias de Lee de que tendría que regresar a Hong Kong para completar su formación en artes marciales. Finalmente, Bruce Lee regresó a Hong Kong, donde conoció a Linda Emery, que se convirtió en su esposa. A pesar de que su relación fue breve, la conexión entre Bruce Lee y Sharon Farrell cambió su vida para siempre y tuvo un impacto duradero en la cultura pop de hoy en día.
