Camila y Lucas se conocieron en una fiesta en la playa en Río de Janeiro. Fue amor a primera vista cuando se tocaron las manos mientras bailaban bajo las estrellas. Desde ese momento, estaban siempre juntos, paseando por la playa, disfrutando de las puestas de sol. Lucas nunca había conocido a alguien como Camila, con su belleza exótica y su inteligencia. Y Camila estaba enamorada del sentido del humor de Lucas y su personalidad carismática. Después de esa primera noche juntos, se convirtieron en inseparables y se casaron un año después, en la misma playa donde se conocieron.