Camille Claudel y Claude Debussy mantuvieron una relación sentimental durante varios años a finales del siglo XIX. Ambos eran artistas y compartían una gran pasión por la música y la creatividad. Camille Claudel era escultora y alumna de Auguste Rodin, con quien también mantuvo una relación tumultuosa. Conoció a Debussy en 1887, cuando él estaba casado con su primera esposa, pero su relación se intensificó en 1892, cuando Debussy le pidió a Claudel que diseñara un relieve para la portada del ballet "La Damoiselle élue". A partir de entonces, la relación entre los dos se intensificó y Claudel se convirtió en la musa y amante de Debussy. Él le dedicó varias obras musicales, incluyendo su pieza "La Demoiselle élue" y su suite orquestal "La Mer", que fue inspirada en su amor por el mar y por Claudel. Sin embargo, la relación no duró mucho tiempo y eventualmente terminó en 1899. Claude Debussy se casó con su segunda esposa el mismo año, y Camille Claudel comenzó a sufrir problemas psicológicos que eventualmente la llevarían a ser internada en un hospital psiquiátrico durante los últimos 30 años de su vida. Aunque su relación fue tumultuosa y breve, el amor entre Camille Claudel y Claude Debussy ha sido recordado como un ejemplo de la conexión profundamente creativa y apasionada que puede surgir entre dos artistas talentosos.
