Carlotta conoció a Monterey en el parque mientras paseaba a su perro. Monterey estaba sentado en un banco, tocando su guitarra. Después de que Carlotta detuvo a escuchar su música, comenzaron a hablar y descubrieron que tenían intereses en común, como la música y la gastronomía. Monterey le pidió a Carlotta que se uniera a él en su próximo concierto en vivo, donde conocerían a Malvin, el propietario del bar donde se llevaba a cabo el evento. Malvin echaron un vistazo a Carlotta y Monterey tocando juntos en el escenario y quedaron impresionados. Después del concierto, invitaron a Carlotta y Monterey a tomar una copa y charlar. Desde entonces, los cuatro se han convertido en buenos amigos y colaboran en muchos proyectos creativos juntos.
