Carolina y Ricardo se conocieron en una noche de verano en una fiesta en la playa. Ellos estaban en el mismo grupo de amigos y se empezaron a hablar en una conversación casual. Enseguida se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común y se sentían muy cómodos hablando entre ellos. La noche pasó muy rápido y antes de que se dieran cuenta, ya se había acabado la fiesta. Pero ninguno de los dos quería dejar de hablar y seguir conociéndose. Intercambiaron números y decidieron que se verían de nuevo pronto. Y así fue, empezaron a salir juntos y hoy en día siguen juntos, felices y enamorados.