Carolyn y Christie se conocieron en una clase de yoga en el centro de la ciudad. Ambas estaban en la búsqueda de una práctica que las ayudara a encontrar la paz interior y a mejorar su salud. Al final de la sesión, se presentaron y intercambiaron números telefónicos. Más tarde, Carolyn invitó a Christie a una cena en casa de sus amigos. Allí, Christie conoció a John y Julian Reynolds, dos hermanos que eran amigos cercanos de Carolyn. Christie quedó impresionada por la amabilidad y el sentido del humor de los hermanos, y rápidamente establecieron una conexión. Después de esa cena, las cuatro personas comenzaron a salir juntas con más frecuencia. Christie y John se dieron cuenta de que tenían una gran cantidad de intereses comunes, como la música y los deportes al aire libre. Poco a poco, comenzaron a conocerse más profundamente y se enamoraron. Hoy en día, Carolyn y Christie siguen siendo amigas cercanas de John y Julian Reynolds, y la pareja felizmente casada siempre recuerda con cariño esa cena donde se conocieron por primera vez.
