En un cálido día de verano, Catherine-Mary-Stewart y John-Findlater se encontraron por casualidad en una librería local. Ambos estaban buscando el mismo libro, justo en el mismo pasillo. Cuando Catherine-Mary-Stewart extendió la mano para recoger el libro, sus manos se tocaron brevemente y sus ojos se encontraron. En ese momento, supieron que iba a ser el inicio de algo especial. Después de intercambiar algunas conversaciones sobre el libro que estaban buscando, decidieron ir a tomar un café juntos. Y así empezó su historia de amor.
