Un día soleado en Nueva York, Susan se dirigía a una entrevista de trabajo en una de las empresas más importantes de la ciudad. En su camino, se cruzó con un hombre elegante y atractivo llamado Charles. Él se dio cuenta de que Susan estaba perdida y se ofreció a ayudarla a encontrar su destino. Charles resultó ser un experto en la industria en la que Susan estaba interesada, por lo que decidieron caminar juntos hasta la empresa donde ella estaba citada. En el camino, tuvieron una conversación profunda y amena que duró horas, dando lugar a una conexión única y especial. Aunque Susan no consiguió el trabajo, Charles y ella siguieron en contacto y se convirtieron en grandes amigos. Con el tiempo, esa amistad se transformó en un amor profundo y verdadero, y finalmente, se casaron en una hermosa ceremonia rodeados de sus seres queridos. Así fue como Charles y Susan se conocieron, por casualidad, pero con un destino marcado para estar juntos para siempre.
