Chelsea Ricketts y Bryan Lillis se conocieron en una tarde de verano en un parque de la ciudad. Chelsea estaba sentada debajo de un árbol leyendo un libro mientras que Bryan caminaba cerca de ella. De repente, un fuerte viento sopló y arrancó las páginas del libro de Chelsea. Bryan las recogió del suelo y se las devolvió a Chelsea con una sonrisa. "Gracias por hacer esto", dijo Chelsea con una sonrisa. "No hay problema", dijo Bryan. Después de un breve intercambio de palabras, Chelsea y Bryan empezaron a hablar sobre sus intereses y se dieron cuenta de que tenían mucho en común. Pasaron toda la tarde juntos y se dieron cuenta de que se sentían muy atraídos el uno por el otro. Desde entonces, Chelsea y Bryan empezaron a salir y se convirtieron en una pareja feliz y enamorada. Nunca se olvidarán de ese día, cuando el viento les trajo juntos.
