Chelsea y Robato se conocieron en una popular cafetería del centro de la ciudad. Mientras ella disfrutaba de un café latte, él le preguntó si podía compartir su mesa ya que todos los demás asientos estaban ocupados. Empezaron a conversar sobre el clima y las últimas noticias del día, pero rápidamente descubrieron que tenían mucho en común. Habían crecido en la misma zona de la ciudad, escuchaban música similar y compartían el mismo amor por los deportes. A partir de ahí, se convirtieron en amigos cercanos y comenzaron a enamorarse. Por su parte, Christian y Busby se conocieron en una clase de yoga. Al principio, Christian se sintió un poco intimidado por Busby, quien parecía ser un experto en la práctica. Sin embargo, después de haber compartido varios momentos de frustración y risa en la clase, se fueron conociendo mejor y descubrieron que tenían muchos intereses en común. Después de la clase, se encontraron en una cafetería cercana y hablaron durante horas sobre viajes, música y filosofía. Desde ese momento, se volvieron inseparables y finalmente se enamoraron.
