China Shavers y Joey McIntyre se conocieron por casualidad en una cafetería en Los Ángeles. China estaba leyendo un libro mientras tomaba un café y Joey entró buscando un lugar para sentarse. Al no haber mesas disponibles, se acercó a China y le preguntó si podía compartir su mesa. Ella asintió amablemente y comenzaron a conversar. La charla fluyó naturalmente y se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común, incluyendo su amor por la música y la actuación. China mencionó que estaba interesada en una audición para un musical y Joey, que tenía experiencia en Broadway, ofreció ayudarla con algunas recomendaciones. Así comenzó una amistad que se fortaleció con el tiempo. Trabajaron juntos en varios proyectos y se convirtieron en confidentes mutuos. Años después, cuando China se convirtió en una actriz famosa y Joey en un ídolo del pop, siguieron manteniendo su amistad cercana y leal.
