Un día soleado de verano, Brea-Bennett estaba caminando por la calle cuando vio a Codi-Milo sentado en un banco en el parque. Algo en él atrajo su atención y se acercó para presentarse. Después de unos minutos de charla, descubrieron que compartían el amor por la música y los deportes extremos. Decidieron intercambiar números de teléfono para que pudieran mantenerse en contacto. Durante las semanas siguientes, hablaron por teléfono y se encontraron en el parque para escuchar música y jugar juntos. Pronto se dieron cuenta de que habían encontrado un gran amigo en el otro y que su conexión era más fuerte de lo que nunca habían imaginado. Finalmente, decidieron formar una banda juntos y desde entonces han estado tocando música y pasando las tardes en el parque, disfrutando de la compañía del otro y creando recuerdos que durarán toda la vida.
