D.W. Griffith y Lillian Gish fueron dos de las figuras más importantes de la época dorada de Hollywood. Griffith fue un cineasta innovador y también fue conocido por su valentía en la dirección. Gish fue una de las actrices más populares de su tiempo, admirada por su talento y belleza. La relación entre Griffith y Gish fue muy importante en la historia del cine. Trabajaron juntos en varias películas, como "El nacimiento de una nación" y "Broken Blossoms", y establecieron una relación artística muy fuerte. De hecho, se dice que Gish fue la musa de Griffith y que él estaba profundamente enamorado de ella. A pesar de la relación estrecha entre ambos, sin embargo, la relación personal de Griffith y Gish tuvo sus altos y bajos. En ocasiones, Griffith se mostraba protector y paternal con ella, mientras que otras veces se mostraba posesivo y celoso. Aunque tras su relación se rumoraban los planes de matrimonio nunca se materializaron. Aunque su relación terminó, Griffith seguía admirando la actuación de Gish y continuó trabajando con ella hasta su muerte. En resumen, la relación entre D.W. Griffith y Lillian Gish fue una de las más memorables de la historia del cine, tanto por la calidad de las películas que hicieron juntos como por la relación personal entre ambos. A pesar de los altibajos, su colaboración y amistad han dejado un legado duradero en la historia del cine.
