Dani y Adriano se conocieron por casualidad en una cafetería. Dani estaba sentado en una mesa revisando su celular cuando Adriano entró en la cafetería y casi chocó con él. Dani, al ver que Adriano estaba perdido, le ofreció ayuda. Adriano, agradecido, aceptó la ayuda y empezaron a charlar. Descubrieron que tenían intereses similares y desde ese día empezaron a salir y a conocerse más. Hoy en día son los mejores amigos y no pueden imaginar sus vidas sin el otro.