Denise acababa de mudarse a la gran ciudad. No conocía a nadie y se sentía muy sola. Un día, mientras paseaba por el parque, se encontró con un grupo de amantes del parkour practicando sus habilidades. Ella siempre había admirado esa disciplina, así que decidió acercarse y observarlos. Fue entonces cuando vio a Voodoo. Era el más alto y musculoso del grupo, y también el más hábil. Denise no pudo evitar sorprenderse con la facilidad con la que saltaba de un edificio a otro. Después del entrenamiento, Voodoo se acercó a Denise y le preguntó si quería unirte al grupo. Ella estaba muy nerviosa, pero también emocionada por la oferta. Aceptó. A partir de ese día, Denise y Voodoo se convirtieron en grandes amigos gracias a su pasión por el parkour. Pasaban horas entrenando juntos y ella aprendía sus trucos más impresionantes. Pero no fue hasta una fiesta de cumpleaños de un amigo en común que se dieron cuenta de que sentían algo más el uno por el otro. Desde entonces, su amistad se convirtió en una relación amorosa llena de aventuras y emociones extremas.
