Diane y James se conocieron de manera muy peculiar, en una conferencia de tecnología en la que ambos se inscribieron por su cuenta. Durante la charla principal, Diane chocó accidentalmente su pierna contra la de James mientras se desplazaba por el pasillo en busca de una bebida. A ambos les sorprendió la coincidencia y aprovecharon para intercambiar opiniones sobre la conferencia. James le ofreció a Diane invitarla a cenar para seguir hablando sobre tecnología y aprovechar la ocasión para conocerse mejor. Esa noche, ambos descubrieron que tenían mucha afinidad en sus intereses y desde entonces, se han convertido en grandes amigos y compañeros en numerosos proyectos tecnológicos. Aunque ninguno de los dos esperaba conocer a alguien especial en esa conferencia, hoy en día agradecen ese accidente como el inicio de su amistad y su carrera en el mundo tecnológico.
