Douglas Fairbanks y Tallulah Bankhead tuvieron una amistad muy cercana en los años 20 y 30 del siglo XX. Ambos eran actores de cine y teatro, y se conocieron en Hollywood en 1923, cuando Bankhead todavía era una actriz novel en busca de su gran oportunidad. La relación entre Fairbanks y Bankhead fue muy especial, aunque nunca se sabe si llegó a ser romántica o simplemente una amistad muy íntima. Lo cierto es que se dice que eran inseparables, viajaban juntos, pasaban largas jornadas y noches juntos y compartían una gran afición por la fiesta, el alcohol y el juego. Se dice que Fairbanks quedó enamorado de Tallulah, pero que esta no correspondió sus sentimientos por ser él un hombre casado. Sin embargo, la relación entre ambos fue siempre muy estrecha, y fue Bankhead quien acudió a su lado cuando en 1939 Fairbanks falleció a causa de un infarto. La vida de ambos fue muy pública y mediática, por lo que sus escapadas y aventuras traspasaron el mundo del cine y el teatro para convertirse en leyendas de la vida bohemia y nocturna de la época dorada de Hollywood. Hoy en día, Fairbanks y Bankhead son recordados como dos de los grandes iconos cinematográficos del siglo pasado, y su relación continúa siendo objeto de fascinación y especulación entre los seguidores y amantes del cine clásico.