Drew y Romeo se encontraron por casualidad en un evento de moda en Los Ángeles. Al principio se saludaron cortésmente, sin pensar que ese sería el comienzo de una gran amistad. Luego, durante la cena, comenzaron a conversar y descubrieron que compartían intereses similares y que ambos habían crecido en el mundo del entretenimiento. A partir de ese momento, Drew y Romeo comenzaron a pasar más tiempo juntos, compartiendo su pasión por la música y las películas, y apoyándose el uno al otro en sus respectivas carreras. Así fue como nació una amistad inesperada y duradera entre estos dos talentosos jóvenes.