Eddie Fisher y Marilyn Monroe fueron dos prominentes figuras de Hollywood en la década de 1950. Ambos encontraron la fama en la industria del entretenimiento: Fisher como un popular cantante y Monroe como una reconocida actriz. La relación entre Fisher y Monroe comenzó en 1953, cuando se conocieron en una fiesta en Hollywood. En ese momento, Fisher estaba casado con su primera esposa, la actriz Debbie Reynolds, mientras que Monroe estaba en su segundo matrimonio con el jugador de béisbol Joe DiMaggio. A pesar de estar casados, Fisher y Monroe comenzaron una relación amorosa que duró varios meses. La prensa y el público se obsesionaron con la pareja, especialmente después de que Fisher dejara a Reynolds para estar con Monroe. La relación entre Fisher y Monroe terminó en 1955 cuando ella se casó con el escritor Arthur Miller. Fisher se casó más tarde con la actriz Elizabeth Taylor y tuvo una carrera exitosa en la música. A lo largo de los años, Fisher habló públicamente sobre su relación con Monroe, diciendo que ella era una mujer increíblemente hermosa y talentosa, pero también vulnerable y necesitada de afecto. La relación entre Fisher y Monroe sigue siendo una de las más icónicas de Hollywood, y ha sido retratada en varias películas y documentales a lo largo de los años.
