Ashley Cain, jugador de fútbol profesional, y Emily Colley, diseñadora de moda, se conocieron por casualidad en una tienda de deportes en la ciudad de Manchester. Ashley estaba buscando guantes nuevos y Emily estaba comprando ropa deportiva para su próximo viaje a México. Ambos llegaron al mismo tiempo a la sección de guantes, y debido a que Ashley no encontraba lo que estaba buscando, Emily decidió ayudarlo. A medida que conversaban, descubrieron que tenían muchos intereses en común, incluyendo la música, el arte y los deportes. Ashley invitó a Emily a tomar un café después de que terminaron sus compras y desde ese momento, comenzaron a salir juntos. Desde aquel día, han sido inseparables y han compartido muchas aventuras y recuerdos juntos, incluyendo un viaje romántico a las playas de Bali.