Erika-eleniak y Scott-Baio se conocieron en una fiesta en Hollywood organizada por un productor de cine. Scott había sido invitado por su amigo, mientras que Erika estaba allí como parte del elenco de la película que estaba filmando. Al principio, no se hablaron mucho, pero durante un juego de charadas, Scott y Erika acabaron siendo compañeros de equipo. Mientras se esforzaban por adivinar las palabras y frases más difíciles, empezaron a sentirse más cómodos el uno con el otro y comenzaron a conversar. Descubrieron que tenían mucho en común, incluyendo un pasatiempo compartido por las actividades al aire libre, y después de la fiesta intercambiaron números de teléfono. La semana siguiente, Scott llamó a Erika para invitarla a un partido de béisbol y desde entonces se han convertido en buenos amigos.